Revista sobre educación y liderazgo educativo DYLE Nº 25

DYLE Nº 25

Monográfico

Nuevas perspectivas en la mejora de la formación inicial del profesorado de secundaria, bachillerato y FP

Cristina Ceballos-Hernández

Universidad de Sevilla. Facultad de Turismo y Finanzas

Guadalupe Trigueros-Gordillo

Universidad de Sevilla Escuela Internacional de Posgrado

Resumen: El trabajo analiza la formación inicial del profesorado de secundaria, destacando algunas carencias. Se detalla el plan de formación complementaria desarrollado en nuestra Universidad, que incluye talleres y actividades para mejorar habilidades pedagógicas y de comunicación, con resultados positivos en la preparación del futuro docente.

Palabras claves: Máster formación profesorado, carencias, formación complementaria, prácticas.

Introducción

Nos gustaría comenzar con una cuestión que invita a la reflexión. Está dirigida tanto a docentes que están implicados en la formación inicial del profesorado de secundaria como a tutores que reciben a estos profesores en formación durante las prácticas. También a aquellos docentes que ejercen su actividad en los centros educativos y a los estudiantes que cursan el máster de formación del profesorado. Esta cuestión está referida a la preparación que estos docentes reciben en su fase de formación inicial en el máster en las universidades españolas. ¿Están los estudiantes preparados para afrontar con éxito un periodo de prácticas? ¿La formación que reciben en el título es suficiente? Nos preguntamos: más allá de los contenidos incluidos en los planes de estudio, ¿hay habilidades que nuestros estudiantes deban desarrollar para un óptimo aprovechamiento de este periodo de prácticas y para su desempeño profesional futuro? Las autoras de este trabajo tienen en su haber 15 años de experiencia en la formación inicial del profesorado de Enseñanza Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanzas de Idiomas. Esas preguntas nos las planteamos cada curso desde la comisión académica del máster y la conclusión a la que llegamos es que la formación no es suficiente y debemos trabajar por enriquecer la misma mediante una formación complementaria.

El máster de formación del profesorado es de un máster habilitante y obligatorio para poder ejercer la profesión docente, tanto en centros públicos como privados y concertados. Su objetivo fundamental es ofrecer una formación pedagógica y didáctica a los futuros profesores y profesoras para el ejercicio de esta profesión, en la materia que le corresponda, proporcionando conocimientos, habilidades y experiencia práctica. En el máster se forma a este futuro profesor para que pueda enseñar los contenidos de la especialidad correspondiente (Matemáticas, Lengua y Literatura, Economía, Educación Física, Biología, etc.), actuar profesionalmente como miembro de un equipo docente participando en el marco de una comunidad educativa y ejercer de facilitador del aprendizaje del alumnado. Estos estudiantes carecen, en la mayoría de los casos, de formación pedagógica previa, por lo que el trabajo que se tiene por delante, a pesar de la escasa duración del máster, es bastante importante.

Las prácticas externas constituyen un importante pilar formativo para el futuro egresado universitario, y en especial, para titulaciones que tienen una especialización como son las de Máster. En el máster de formación del profesorado, sin duda, se trata de una etapa fundamental. Sin embargo, la duración de las prácticas es escasa, teniendo además en cuenta que la duración del máster, ya de partida, es también escasa, y solo asciende a 60 créditos. Aunque el número de horas varía entre universidades españolas, este oscila entre las 100 horas y las 400 horas, siendo el valor medio 203 horas.

La duración de esta formación inicial, que no llega al año, se considera escasa para preparar a estos maestros del futuro, o al menos, para hacerlo suficientemente bien. Es por ello por lo que, en nuestra universidad, donde además solo se realizan 100 horas de prácticas en centros educativos, llevamos varios años poniendo en marcha iniciativas que suponen un enriquecimiento en la formación del futuro docente y su adecuada preparación para, inicialmente el periodo de prácticas, y para su próxima inmersión en esta apasionante profesión. Estas prácticas se realizan en dos periodos: uno breve de contacto y observación y otro posterior de mayor duración en el que el profesor en formación realiza una intervención en el aula. El objetivo de este trabajo es presentar este plan de enriquecimiento formativo y preparatorio para las prácticas y los resultados que de él se han derivado.

Deficiencias en la formación inicial del profesorado: una visión desde la literatura

El prácticum y el tutor de prácticas tienen un papel fundamental en la adquisición del conocimiento práctico del aula y en la gestión de esta (Arco et al., 2021). Sin embargo, autores como Ma et al. (2022) han hallado que los profesores de secundaria consideran insuficientes los contenidos de carácter práctico en su formación inicial. En este sentido, González-Mayorga & Rodríguez Esteban (2023) señalan la necesidad de dotar a los planes de estudios del Máster de Formación del Profesorado de una mayor presencia de contenidos relacionados con la gestión del aula. También se detectan entre los profesores en formación inicial en secundaria una falta de actitud y sensibilidad hacia la educación inclusiva, la atención a la diversidad y el alumnado con discapacidad, así como otras lagunas formativas en el máster (Arias-Pastor et al., 2023). Dentro de las habilidades de un docente, la competencia digital se ha convertido en un componente fundamental que debe trasladarse a la formación inicial del profesorado (González-Rodríguez et al, 2022).

Resultados: Plan de enriquecimiento formativo del futuro docente

A partir del feedback de los tutores profesionales y de la constante comunicación y colaboración con éstos, se han contrastado estas deficiencias y se han detectado algunas nuevas asociadas al propio contenido del máster. En ellas se ha venido trabajando durante años en nuestro título. De esta forma se ha diseñado e implementado un ambicioso plan de formación complementaria, cuyo objetivo es preparar adecuadamente a nuestro estudiantado para afrontar con éxito el periodo de prácticas y para su posterior inserción al mercado laboral.

Para poder llevar a cabo estas iniciativas se acude a todo tipo de convocatorias incluidas en el Plan Propio de docencia de la Universidad, tratando de exprimir al máximo estos meses de formación. De esta forma se organizan distintas acciones con distintos formatos: talleres, mesas redondas, conferencias, etc., sobre distintas temáticas, a lo largo del curso, a veces de forma previa a que den comienzo las clases y, otras veces, de forma paralela. Esta formación complementaria está en constante e íntima conexión con los centros de prácticas, impartiéndola profesores de secundaria en activo en la mayoría de las ocasiones.

Interfaz de usuario gráfica

El contenido generado por IA puede ser incorrecto.
Interfaz de usuario gráfica

El contenido generado por IA puede ser incorrecto.

Figura 1: Animación Orientación al alumnado del máster de formación del profesorado para la incorporación al centro educativo de prácticas(Trigueros et al., 2022).

Entre las acciones del plan de andamiaje para la preparación e inmersión en el periodo de prácticas hemos elaborado y difundido entre los estudiantes una serie de animaciones. Una de ellas general sobre el máster, donde se les orienta sobre distintos aspectos de éste y otra orientada específicamente a la incorporación de los estudiantes a los centros de prácticas (Figura 1). En estas animaciones didácticas participan docentes de secundaria, bachillerato y FP.

Por otro lado, al día siguiente de la apertura del máster, se organizan unas jornadas de orientación a la profesión docente, en formato de mesas redondas, que constituyen el primer contacto de nuestro estudiantado con los centros educativos. En estas mesas se da a conocer cómo se organizan, cómo funciona y cómo se gestiona un centro educativo de la mano de un director y otros miembros del equipo directivo. Por otro lado, se realiza un acercamiento a la figura del orientador, presentando las funciones que tiene encomendadas y el apoyo que les brindará como docentes. También se les presenta cuál es la función que realiza el centro de profesores, que aglutina la formación permanente del profesorado.

Una de las acciones más interesantes dentro del plan de formación complementaria son las jornadas de prácticas externas. Tienen un formato de taller y son impartidas por orientadores, profesores de secundaria, bachillerato, formación profesional o bien especialistas en determinadas materias. Están orientadas a la preparación para las prácticas en los centros educativos. Las temáticas varían cada curso, enfocándose a cuestiones clave para la función docente (Figura 2).

También dentro del plan de formación complementaria se desarrollan talleres prácticos para la mejora de las habilidades de comunicación de los estudiantes, tanto en entornos presenciales como en entornos online. Se trabajan técnicas eficaces de comunicación y los estudiantes reciben un feedback individualizado de las prácticas que realizan. Son talleres muy bien valorados por los estudiantes. Estas habilidades comunicativas que los alumnos adquieren las ponen en práctica en distintos momentos:

En primer lugar, en el momento de incorporación a las prácticas. Muchos estudiantes señalan que tienen un miedo escénico que les bloquea cuando piensan en colocarse delante de un grupo de alumnos, no se ven capaces de hablar en público. Estos talleres les resultan de gran utilidad.

También ponen en práctica estas habilidades durante la defensa del Trabajo de Fin de Máster (TFM), asignatura obligatoria en el máster.

Por último, en el momento en el que se presentan a la oposición para acceder a la función docente.

Otro de los ejes fundamentales de nuestro plan de formación complementaria es LaTeN (Laboratorio de Teatro para Enseñantes Noveles). En el seno del laboratorio se han puesto en marcha iniciativas para fomentar el teatro como estrategia pedagógica y el uso de técnicas teatrales para iniciar, mejorar y perfeccionar la comunicación en el escenario que representa el aula. Estas acciones, que están a cargo de actores profesionales, adoptan distintos formatos: talleres de técnicas escénicas, talleres de dramatización, mesas redondas, etc. Además, en el marco de LATEN se ha desarrollado un proyecto de innovación docente que ha tenido como objetivo desarrollar las habilidades y los contenidos trabajados en el laboratorio de teatro en el TFM. Estos trabajos son espacios que permiten la reflexión y profundización del estudiantado en diversos temas. Se han defendido numerosos trabajos sobre la aplicación de las artes escénicas en la docencia desde distintas perspectivas y en distintas especialidades del máster.

Texto

El contenido generado por IA puede ser incorrecto.

Figura 2: Talleres desarrollados para el enriquecimiento en la formación inicial del profesorado.

Por último, dentro del plan de formación complementaria se organizan talleres de trabajo enfocados a ampliar el conocimiento y mejorar la sensibilización del estudiantado hacia temas como la interculturalidad, la multiculturalidad, la perspectiva de género, la diversidad, estimulando a que se trabajen estas temáticas en los TFM.

Conclusiones

Las acciones que hemos presentado forman parte del plan de formación complementaria que se desarrolla en el máster y que está encaminado a trabajar con los estudiantes habilidades y competencias que se consideran necesarias para afrontar con éxito el periodo de prácticas y para, fortalecer su formación para su desarrollo como profesionales de la enseñanza. Se llevan a cabo antes de comenzar la docencia o de forma simultánea a las clases, la mayoría de ellas antes de que comiencen las prácticas de los estudiantes. Debemos tener en cuenta que esta formación complementaria es completamente voluntaria y que las plazas son limitadas, pues son acciones muy prácticas en la modalidad de taller, en la mayoría de las ocasiones.

La evaluación de este plan es muy positiva. Los cuestionarios que se realizan tras la finalización de las acciones ponen de manifiesto una alta satisfacción de los estudiantes que, a su vez, consideran que esta formación debería estar incluida, como obligatoria u optativa, dentro del plan de estudio. También recibimos un positivo feedback por parte de los centros de prácticas cuando nuestros estudiantes se incorporan. Consideramos que estamos en el camino correcto y que, con este plan de formación, estamos contribuyendo a mejorar la preparación del estudiantado para un buen aprovechamiento de las prácticas y, en general, para su desempeño como profesionales de la enseñanza. El máster debe ser espacio de formación, pero también de reflexión permanente sobre las necesidades formativas. Estos futuros profesores van a impartir docencia en centros educativos con estudiantes y realidades que evolucionan. Sin duda, una importante responsabilidad.