DYLE Nº 23

La biblioteca escolar conecta personas
Ana María Regueira Lavandeira
Las bibliotecas escolares están comprometidas con la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible que fue adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre de 2.015. De naturaleza universal e inclusiva esta Agenda recoge 17 objetivos de desarrollo sostenible y 169 metas, que abarcan preocupaciones transversales a todos los países, de índole social, económica y ambiental.
Estos objetivos persiguen la igualdad de oportunidades entre personas, la protección del planeta y la creación de prosperidad en un mundo en paz que trabaja para superar los retos presentes.
Desde la biblioteca de nuestro centro escolar con alumnado de 3 a 12 años, somos plenamente conscientes del valioso recurso que supone la biblioteca para contribuir a formar un alumnado más solidario que participe de unas relaciones humanas armónicas para disfrutar de una sociedad más integradora y justa.
En el curso 2.022/23 nos incorporamos al programa de Plan de Mejora de Bibliotecas Escolares (PLAMBE) que convoca anualmente la Consellería de Cultura, Educación, Formación Profesional y Universidades de la Xunta de Galicia, por el que entre otros recursos, recibimos información, asesoramiento, materiales y compartimos inquietudes. Dentro del PLAMBE existe un programa específico denominado: “Bibliotecas Escolares Solidarias” en el que participamos en este curso por primera vez, que consiste en formar al alumnado en actitudes solidarias y de implicación personal con su entorno más próximo.
En este contexto académico, desde la biblioteca hemos iniciado un proyecto consistente en conectar entre sí al alumnado de distintas edades y capacidades, al mismo tiempo que nos servimos de la programación de actividades aún incipientes dentro del proyecto, para que la biblioteca salga al exterior y conecte con centros de mayores, cívicos, escuelas infantiles y vecindario, para retroalimentarnos.
La biblioteca escolar es según la Asesoría de Bibliotecas Escolares de Galicia:
1.- Un espacio de lecturas.
2.- Un centro de recursos de la información.
3.- Una biblioteca de proximidad.
4.- El lugar en el que se reúnen los fondos documentales del centro.
5.- El lugar donde los documentos están accesibles.
6.- El lugar donde leemos, nos informamos y aprendemos.
7.- Apoyo al Proyecto Educativo del Centro.
8.- Ventana al exterior que integra las tecnologías de la información y la comunicación.
9.- Atiende a las demandas de cada uno de los niveles, materias y sectores de la comunidad educativa.
10.- Compensa las desigualdades socioculturales y económicas de origen del alumnado y sus familias.
11.- Atiende a la diversidad del alumnado.
12.- Una oportunidad para ejercitar las competencias intelectuales y emocionales, para convivir y construir ciudadanía.
Es en esta última acepción de biblioteca escolar, donde el proyecto “Conectando Personas” planificado dentro del programa de “Bibliotecas Escolares Solidarias” que he empezado a coordinar este curso, incide y está pensado para conseguir los siguientes objetivos:
•Poner en valor las relaciones humanas armónicas así como los beneficios que éstas ofrecen para la persona y la sociedad.
•Obtener un resultado positivo en la convivencia y bienestar emocional de la comunidad educativa.
En todos los centros escolares y por extensión en todos los ámbitos de la vida, las relaciones personales son fundamentales para nuestro equilibrio emocional y cuánto más grato sea el ambiente más propicio será en el caso de los colegios para el aprendizaje y la innovación educativa.
Alentar “el compañerismo” y además entre distintas edades, es la base para crear en el alumnado una sensación de tranquilidad, que convierte el colegio en un lugar seguro en el que desarrollar todas sus destrezas de forma satisfactoria. Sentirse apreciado en el aula elimina frustraciones en el alumnado.
En nuestro centro educativo de titularidad pública, están matriculados/as alrededor de 440 alumnos/as diversos en cuanto a origen, cultura, lengua, condición económica y capacidades, es prioritario que convivan en un lugar libre de tensiones y para ello hay que trabajar las relaciones humanas.
Además de las estrategias llevadas a cabo por las familias, los equipos directivos, los departamentos de orientación y las tutorías; la biblioteca es un agente óptimo para favorecer las relaciones personales en la vida del centro y atender las necesidades emocionales de un alumnado con distintas carencias e inseguridades, además de un medio eficaz para actuaciones solidarias y altruistas.
Con la confianza en que nuestro proyecto proporcionaría una mejoría en la convivencia escolar e integraría al alumnado con dificultades para socializar, programamos este curso una serie de acciones que contribuyeron a un cambio significativo en las relaciones entre iguales y que ofrecieron al alumnado la posibilidad de compartir actividades con personas de otras generaciones.
La acción que más contribuyó a lo largo del curso, a los objetivos del proyecto, fue abrir la biblioteca en el tiempo de recreo. Se acogió al alumnado que hizo uso de este servicio, con el apoyo de 25 alumnos/as colaboradores/as, pertenecientes a 5º y 6º de Primaria, en turnos de 5 colaboradores/as cada día, a los que formamos con 3 pautas básicas:
•Tratar con respeto, amabilidad y afecto a los usuarios/as de la biblioteca.
• Conversar y jugar con el alumnado con menos habilidades sociales.
• Pedir ayuda al profesorado de guardia ante una situación que no sepan gestionar.
La biblioteca es un espacio en el que a través sobre todo de los juegos (palabrea, ajedrez, parchís, el Uno…) se trabaja con las personas las actitudes de respeto, colaboración y generosidad hacia los compañeros.
El alumnado colaborador también apoya en la formación del alumnado que necesita reforzar la información impartida al inicio de cada curso escolar.
El ambiente distendido y agradable que existe en los recreos de la biblioteca se traslada a las aulas mejorando las relaciones entre compañeros. No es una fantasía, es un trabajo comprometido y constante de los docentes, formando a los colaboradores/as y detectando necesidades, dificultades o tensiones para dar una respuesta a tiempo y adecuada a los alumnos/as, con el respaldo siempre del departamento de orientación y del equipo directivo. Para ello, es fundamental una colaboración sin fisuras entre todo el claustro por lo que la adecuada dinamización de este órgano, es lo que garantiza los objetivos de los programas llevados a cabo en el colegio entre ellos “Conectando Personas”, de hecho, la aprobación de estos programas por el claustro y el consejo escolar consensúan el compromiso de los miembros de ambos órganos con el desarrollo de éstos.
Otra acción fue la actividad de amadrinamientos/apadrinamientos lectores, porque ésta conecta sobre todo al alumnado de Educación Infantil y Primaria, que si no fuese por esta acción, no sería posible que se relacionase dentro del colegio, puesto que no comparten recreos ni festivales. El hecho de que se conozcan a través de esta actividad favorece la unidad del centro y refuerza el sentimiento de pertenencia y apoyo dentro de un grupo grande.
Estos acompañamientos lectores se realizan a lo largo de todo el curso en 3 lenguas, (castellano, gallego e inglés) en las aulas, la biblioteca y el Día del Libro para todo el alumnado en el patio.
Por segundo año consecutivo se hacen para celebrar el Día del Libro, esta actividad comienza unas semanas antes del 23 de abril, cuando las madrinas y los padrinos (3º, 4º,5º y 6º de E. Primaria) van a las aulas de los ahijados/as (E. Infantil y 1º y 2º de Primaria) a conocerlos y entablan una conversación que les permitirá escoger a madrinas y padrinos en la biblioteca, el libro que leerán en el patio el día de la celebración a sus ahijados/as. Las madrinas y los padrinos traen una toalla de su casa, para sentarse en el patio con su ahijado/a. Esta actividad crea lazos sociales, integradores y afectivos en el alumnado.
Las lecturas compartidas en el centro de mayores que llevamos 2 años programando, tenemos intención de darles continuidad porque compartir tiempo y espacio con personas de distintas edades, contribuye a fomentar en el alumnado actitudes solidarias y de compromiso con su entorno más próximo. Surgen de forma espontánea, conversaciones intergeneracionales.
En este proyecto se pone la lectura y los demás recursos de la biblioteca al servicio de las relaciones humanas. Los niños/as y adultos pasamos muchas horas delante de una pantalla sin conectar de forma natural con otras personas y la biblioteca ayuda a paliar esta desconexión humana.
La biblioteca, a través de este proyecto, puede promover el bienestar emocional aportando un mayor sentimiento de pertenencia, ayudando a reducir el absentismo y previniendo situaciones de acoso o violencia.
Por mi experiencia al frente de la biblioteca escolar, muchas veces se priorizan funciones de ésta como la “alfabetización múltiple” (la comprensión, utilización y evaluación crítica de diferentes formas de información, incluidos los textos e imágenes, escritos, impresos o en versión electrónica), cuando el alumno/a no ha desarrollado la madurez adecuada que le permita realizar esta actividad de forma satisfactoria. Por ello, me parece primordial realizar una evaluación sobre las necesidades reales del alumnado del centro y adaptar las funciones de la biblioteca escolar a éstas. Mejorar a través de la biblioteca las relaciones humanas es un reto que los colegios no deberíamos obviar porque son un medio útil para la formación de personas asertivas y para ayudar a eliminar la crispación cada vez más presente en el ámbito social.
Tenemos alumnado que no ha recibido una educación familiar en la que se le hayan impuesto límites a su comportamiento, la mayoría de los departamentos de orientación están desbordados y son bastantes los progenitores/as que exculpan a sus hijos/as de las actitudes agresivas e irrespetuosas que tienen hacia terceros/as, evadiendo sus responsabilidades y perjudicando de esta manera a sus propios hijos/as y por ende a la sociedad.
La biblioteca ha de poder dar respuesta a las actuales necesidades del alumnado, es cierto que muchas personas han considerado la biblioteca como el motor de la escuela, generadora de cambios educativos y en bastantes casos así ha sido, gracias a los y las profesionales que con gran ilusión y esfuerzo han dispuesto de su tiempo libre para dedicárselo a la biblioteca.
Una de las medidas pendientes para la mejora de la biblioteca escolar es que el equipo docente implicado disponga de horas suficientes dentro del horario lectivo para desarrollar todas las funciones que se le atribuyen a ésta y las nuevas funciones que demande la realidad educativa que por lo expuesto en este artículo sería una de ellas, el procurar el bienestar emocional del alumnado a través de acciones que alienten y refuercen las relaciones humanas armónicas.
En resumen, podemos afirmar que tanto el bienestar emocional del alumnado como por extensión el de la comunidad educativa se ven muy fortalecidos por iniciativas como la del proyecto “Conectando Personas” impulsado y coordinado por nuestra biblioteca escolar.