DYLE Nº 25

El Prácticum en los títulos universitarios, elementos que potencian su valor formativo
Juan Salamé Sala
Inspector de educación y expresidente de FEAE estatal
Ana María Martín-Cuadrado
Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED)
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Las asignaturas denominadas prácticas externas y/o prácticum, presentes en la mayoría de las titulaciones universitarias, han supuesto, desde la implantación del Plan Bolonia, un c ambio profundo en la formación de los estudiantes. Ha sido y sigue siendo una puerta abierta a los primeros contactos con la futura profesión, los/las profesionales y el mundo laboral. Las prácticas externas y/o prácticum suponen una de las materias más relevantes en el currículo de las titulaciones universitarias. Su contribución en la formación del futuro profesional es un hecho ampliamente reconocido. Su nexo de unión con el resto de las materias curriculares persigue un ida y vuelta sobre la relación de la teoría y la práctica. Cabe preguntarse si la mera existencia de esta materia y la estancia de los estudiantes en los centros de prácticas es suficiente o existen factores que contribuyen a asegurar su completo valor formativo. Del mismo modo, surge otra reflexión sobre la idoneidad de las prácticas externas y/o prácticum durante la formación inicial de los/las universitarios/as y la óptima inserción como egresadas/os.
En este monográfico hemos querido analizar cómo se desarrollan estas asignaturas versus materia desde puntos de vistas distintos en función del rol de cada interviniente. Así, desde la experiencia del estudiante, del tutor o de la tutora de centros colaboradores, docentes universitarios y, en el caso de la UNED, del profesorado tutor de prácticas. Cada uno de ellos forma parte de un equipo cuyos esfuerzos se centran en el acompañamiento de la persona (estudiante) y del desarrollo de su práctica reflexiva, así como de la supervisión (seguimiento y evaluación), para que el periodo de estancia se transforme en un periodo formativo y contribuya a la formación de las competencias de la titulación y de otras, ligadas al entorno laboral y a su desarrollo profesional, como son la ocupabilidad y la empleabilidad.
Pero no pueden existir prácticas sin el factor de impacto que es la institución acogedora (características que la definen como entidades de prácticas de calidad). Para ello, son necesarios los espacios de comunicación y colaboración entre universidad, organizaciones empresariales y, en su caso, la administración pública; ya que las prácticas deben ser un proyecto común entre ellas.
Este monográfico también pretende acercarnos a un modelo formativo y los elementos que lo definirían. Es importante el papel de los tutores académicos y profesionales, agentes imprescindibles para el desarrollo de los procesos de aprendizaje. El análisis de indicadores referidos a la tarea tutorial, como la experiencia de los tutores, la formación adecuada para ser tutores, la motivación hacia la tarea, o las recompensas intrínsecas y extrínsecas por su labor, etc. (Cid et al., 2011; Martín-Cuadrado et al., 2022), permitirá una mayor definición de las tareas específicas y del perfil necesario.
Esperamos que, a lo largo de la lectura de los artículos, de las experiencias y de la entrevista a una especialista y gran conocedora de las prácticas, este monográfico permita a los lectores reflexionar y conocer las prácticas, el peso que adquieren en la formación y su importancia para nuestros estudiantes. Pero, también, que nos permita reflexionar sobre el presente y futuro de las prácticas en los títulos universitarios para potenciar su valor formativo.